Muchas veces vamos muy acelerados en nuestras vidas cotidianas debido al ritmo que se mueve el mundo, tanto profesionalmente como socialmente. Es cierto que las nuevas tecnologías nos han aportado sinfín de beneficios en relación a las comunicaciones, relaciones personales y profesionales, pero el precio es bastante alto, puesto que poner la atención en todo ello significa proyectarnos hacia el exterior casi por completo en detrimento de un acercamiento hacia nuestro interior.

El desconocimiento personal, la falta de autorreflexión sobre lo que hacemos y sobre lo que queremos hacer, genera mucha insatisfacción personal que se proyecta en otros ámbitos de la vida. Es recomendable para apaliar este efecto negativo, una buena organización del tiempo por tareas y un buen desarrollo de los roles en cada una de ellas, es decir, ser la persona que debe estar en ese momento en una determinada situación y poner toda la atención en ello; de esa forma optimizaremos mejor el tiempo y por tanto obtendremos el tan deseado espacio de autorreflexión y búsqueda interior que tanta falta hace en la sociedad moderna.

Os invito pues, ha desarrollar un sistema de gestión del tiempo, a definir correctamente vuestros roles en la vida y ha encontrar un espacio interior para cada uno de vosotros y vosotras.